¿Qué son las

hipotecas multidivisa

Las hipotecas en divisa tienen tres características:

1. El importe de la deuda financiada en el momento de formalización de la hipoteca se convierte automáticamente a la divisa elegida: libras, francos suizos o yenes generalmente.

2. El tipo de interés se referencia al libor de la moneda ( en lugar de al Euribor hipotecario) y se aplica un diferencial de tipo de interés como a las hipotecas contratadas en euros.

3.  Cada mes pagas la cuota equivalente a la conversión correspondiente con la cotización actual de la divisa que hayas elegido, bien sea libras, yenes, francos suizos…

Por ejemplo, una hipoteca en yenes de 200.000 euros a 25 años con un diferencial de 0,80 puntos básicos se pagaría con una cuota mensual de 810 euros (al cambio), mientras que en euros serían 1.295 euros. Con estos datos, parece que el cliente sale beneficiado pero en realidad, los riesgos son elevados. Si el cambio es favorable, puedes reducir tu hipoteca pero generalmente no es así; las hipotecas multidivisa son mucho más caras.

 

Aunque podamos pensar que el banco gana menos con estas hipotecas, no es así. El diferencial que suele cobrar en estas hipotecas (lo que realmente gana el banco) es muy superior al que se ofrecen en las hipotecas comunes. Además, debe pagar las comisiones por cambio de divisas y su redondeo. Cada vez que tengas que pagar la mensualidad de la hipoteca, tendrás que abonar una comisión del 0,2% aproximadamente de la cuota y como suele ser una cantidad baja, normalmente suelen redondearla a 3 euros.

 

Como vemos, los inconvenientes son más numerosos que las ventajas de este tipo de hipoteca, entre ellos:

01- Tu deuda y tu cuota puede crecer sin límite.

02- Tiene más comisiones.

03- Sólo puedes cambiar de moneda a final de mes.